La experiencia de llegar al nuevo Aeropuerto Internacional de Tulum “Felipe Carrillo Puerto” es una delicia para los turistas, pero los problemas comienzan cuando intentan abandonar la terminal.
El traslado desde este aeropuerto, ya sea a Tulum o a cualquier otro destino en Quintana Roo, resulta excesivamente caro en comparación con los precios de transporte en otras ciudades, según denunció el presidente de la Asociación de Hoteles de Tulum, David Ortiz.
El empresario señaló que los altos costos de transporte desde la recién inaugurada terminal aérea están afectando la competitividad del destino turístico.
“El trayecto desde el aeropuerto al centro de Tulum es más costoso que el mismo viaje al centro de la Ciudad de México, e incluso a muchos centros urbanos europeos, incluyendo París”, afirmó el líder hotelero.
Más caro que el avión
El problema radica en las elevadas tarifas de taxis y camionetas turísticas, que pueden superar el costo del propio boleto de avión. Esta situación genera molestia y confusión entre los visitantes, afectando la imagen del destino y contrarrestando los esfuerzos de promoción turística, explicó Ortiz.
Actualmente, la administración del Aeropuerto de Tulum cobra 806 pesos más IVA por el ingreso de una unidad de transporte turístico, mientras que el aeropuerto de Cancún solo cobra 29 pesos por 40 minutos de estacionamiento, incluso para autobuses.
La disparidad en los precios es significativa
Los taxistas del aeropuerto de Tulum llegan a cobrar hasta mil pesos a los visitantes por salir de la terminal, y para destinos más lejanos como Bacalar, el costo podría alcanzar los 10 mil pesos.
David Ortiz y otros líderes turísticos han pedido una corrección inmediata a esta situación, ya que los vuelos anunciados a Tulum podrían optar por no llegar si resulta prohibitivo para los turistas salir por tierra de la terminal aérea. Por lo tanto, instan a los responsables del proyecto y a las autoridades a abordar este problema con prontitud.
Los transportistas también han pedido a la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), encargada de la administración del aeropuerto, que haga un ajuste en sus precios. Sin embargo, no han respondido.