MIAMI — El número de casos en los tribunales de inmigración de Florida sigue en ascenso, se trata del estado que ocupa el primer lugar en expedientes atascados. La cifra en marzo asciende a casi medio millón de casos sin resolver, de acuerdo con los últimos datos del Centro de Información y Acceso de Registros Transaccionales (TRAC), una organización de recopilación, investigación y distribución de datos de la Universidad de Syracuse.
A nivel nacional la cifra de casos atrasados en corte se elevó a 3.363.667 hasta marzo, casi un millón más que hace 9 meses; y casi 300.000 casos más respecto al mes de enero. La cifra tiene la tendencia a seguir creciendo debido a la ola inmigrante que afecta a la frontera sur.
El estado de la Florida ocupa el primer lugar con más casos atrasados en las cortes de inmigración con 494.500. En nueve meses el número de casos se elevó a más de 120.000. En julio los expedientes acumulados eran 376.240. La mayor parte corresponden a la ciudad de Miami con 283.793.
Las nacionalidades con mayor número de casos de asilo en Miami son: Cuba, Haití, Venezuela, Nicaragua, Guatemala, Colombia, Honduras, México, Brasil, Perú, Chile y Rusia.
El segundo estado con más casos atascados en las cortes de inmigración es Texas, con 465.300. Le siguen California, Nueva York e Illinois.
La actual situación hace que los tiempos de procesamiento sean cada vez más lentos. Hay sitios donde los migrantes que han solicitado asilo deberán esperar hasta 10 años para su primera cita ante el juez.
Hasta ahora, cada juez tiene en promedio superior a los 4.595 casos asignados con lo cual se rebasa la capacidad humana y administrativa en cada jurisdicción. Actualmente la cifra de jueces de Inmigración es de 732, que son designados en los 64 tribunales que existen en el país.
El caos migratorio está golpeando a grandes ciudades como Nueva York, no solo por la falta de espacios para albergar a centenares de miles de inmigrantes que a diario llegan y la carga económica que representa el proporcionarles servicios gratuitos; a esa crisis se suma la ola de crímenes violentos a manos de inmigrantes y la presencia de la banda criminal el Tren de Aragua, a quien el Buró Federal de Investigaciones (FBI) apunta, estaría detrás de la ola de crímenes violentos.