Miami. El Tribunal Supremo de Florida falló este lunes a favor de que una enmienda propuesta para la protección al derecho al aborto figure en la papeleta electoral de noviembre próximo, al tiempo que dio luz verde en otra decisión a la prohibición del aborto después de las seis semanas de embarazo.
El primer dictamen de la máxima instancia judicial de Florida tumba los argumentos presentados por la Fiscalía General de Florida para que la enmienda sobre el derecho al aborto no figurase en la papeleta electoral de las elecciones presidenciales de noviembre.
A juicio de la fiscal general de Florida, Ashley Moody, esta enmienda propuesta sobre el derecho al aborto “engaña a los votantes”, pero, dijo en un comunicado, “respetamos las decisiones del tribunal”.
La enmienda al aborto protegería, de ser aprobada, partes del derecho a la interrupción del embarazo después de que Florida endureciese más sus leyes contra el aborto en concordancia con la decisión del Supremo de Estados Unidos de anular el fallo Roe v. Wade de 1973. La enmienda debe ser aprobada por al menos el 60 % de los votantes.
Entre tanto, como resultado de la decisión de hoy del Supremo estatal, la prohibición del aborto transcurridas seis semanas de embarazo entrará en vigor en 30 días, un fallo que, para Fried hace que este estado “albergue ahora una de las prohibiciones de aborto más estrictas del país”.
La interrupción voluntaria del embarazo estaba prohibida en este estado a partir de la semana quince.
Se trata de “una prohibición tan extrema que la mayoría de las mujeres ni siquiera sabrán que están embarazadas antes de pasar la fecha límite”, censuró Fried.
En noviembre, “lo que está en juego no es sólo el acceso al aborto legal y seguro: es el acceso a la atención médica de emergencia, al aborto con medicamentos y a la anticoncepción para los millones de mujeres que dependen de ellos cada año”, destacó Nikki Fried, presidenta del Partido Demócrata de Florida, tras el fallo.
No obstante, la demócrata subrayó que “más de un millón de floridanos firmaron la petición para que la Enmienda 4 se incluya en la boleta electoral, y esa misma coalición políticamente diversa garantizará que Florida siga siendo un faro de libertad en el sur”.
La enmienda propuesta sobre la interrupción del embarazo dice que “ninguna ley prohibirá, penalizará, retrasará o restringirá el aborto antes de su viabilidad o cuando sea necesario para proteger la salud de la paciente, según lo determine el proveedor de atención médica de la paciente”.
Por su parte, Lauren Brenzel, directora de campaña de la organización Planned Parenthood, dijo que el Supremo “afirmó lo que hemos sabido todo el tiempo: que la Enmienda 4 claramente cumple con los requisitos para su colocación en la boleta electoral”.
Brenzel se mostró satisfecha de que, con esta enmienda, sean los floridanos los que “tengan la oportunidad de reclamar su autonomía corporal y su libertad frente a la interferencia del Gobierno votando” sí a esta enmienda en noviembre.
La enmienda prevé además una excepción que ya está incluida en la constitución estatal: que los padres sean notificados antes de que sus hijas menores puedan abortar.
“El gobierno no debe interferir en las decisiones médicas personales que deben ser entre los floridanos y sus médicos. Y los médicos y las enfermeras no deben tener que arriesgarse a ser procesados penalmente para tratar al paciente que tienen delante”, añadió Brenzel.