Chiapas.- El presidente Andrés Manuel López Obrador arribó este viernes a La Concordia, en el centro de Chiapas, en medio de un fuerte dispositivo de seguridad, para inspeccionar los avances de la obra del puente Rizo de Oro.
El mandatario federal no utilizó ningún trayecto por tierra. Viajó desde la Ciudad de México en un helicóptero de fuerzas militares hasta los límites con la presa Chicoasén, donde un fuerte convoy de elementos de la Guardia Nacional y Sedena aguardaban su llegada.
Detrás de él, otro helicóptero custodió el aterrizaje del presidente, que descendió de la aeronave acompañado del gobernador del estado, Rutilio Escandón Cadenas.
En redes sociales, usuarios compartieron el caos vehicular que significó la llegada de López Obrador a la región, debido a que varias vías y carreteras fueron cerradas para su visita, justo después de los hechos violentos que han dejado varios muertos y enfrentamientos entre fuerzas federales y grupos criminales en La Concordia.
La llegada del presidente se dio en medio de total hermetismo y sin la presencia de medios de comunicación en el lugar.
“Toda la frailesca está sitiada por militares y policías, no nos dejan pasar a nuestras comunidades porque dicen que está el presidente recorriendo una obra”, señalaron habitantes en la red social Facebook.
López Obrador estuvo cerca de dos horas en tierra y, de nueva cuenta, volvió a ascender al helicóptero que lo trasladó hasta Chiapas, sin conocer a detalle si su ruta fue hacia el municipio de Palenque o al centro del país.
Este sábado, pobladores de La Concordia acusaron que la seguridad y operativos que durante el viernes se activaron, desaparecieron desde la misma noche del viernes.
La Concordia fue en la última semana el punto medular de enfrentamientos entre células del crimen organizado y agentes de la Guardia Nacional, quienes por la inseguridad que se generaba en la zona montaron un campamento en las inmediaciones de la comunidad Niños Héroes, cercana a la presa Chicoasén.
En ese punto, trabajadores del puente La Concordia reportaron que las tareas de construcción fueron suspendidas por las amenazas de hombres armados, lo que derivó en los enfrentamientos en mención con fuerzas federales.
El centro de derechos humanos Fray Bartolomé de las Casas publicó, con evidencias, que al menos 25 personas habían muerto tras el choque de militares con civiles, entre las que se encontraban víctimas inocentes.
El presidente López Obrador señaló en su conferencia mañanera del miércoles 3 de abril que las cifras eran una mentira y sólo se tenía el reporte de 10 muertes y 13 detenciones
