La atención médica a la población sin seguridad social laboral de la Ciudad de México en clínicas y hospitales, así como las acciones colectivas, de trabajo comunitario en territorio para la prevención y promoción de la salud están garantizadas durante el periodo de transición de los poderes Ejecutivo local y federal, señalaron la secretaria de Salud capitalina (Sedesa), Oliva López Arellano, y quien le sucederá en el cargo en la próxima administración, Nadine Gasman Zylbermann.
La funcionaria capitalina explicó que el proceso de transición de los servicios de atención médica al IMSS Bienestar Ciudad de México, que coordina Alejandro Ávalos Bracho, está muy avanzado y solo faltan algunos aspectos jurídicos como la donación de los centros de salud y hospitales, que tocará concluir a Gasman.
En entrevista conjunta, luego de participar en la presentación de un número especial de la revista Salud Pública de México, Gasman, quien preside actualmente el Instituto Nacional de las Mujeres (Inmujeres), afirmó que la centralización de los servicios de atención médica en IMSS Bienestar, permitirá al Gobierno de la Ciudad enfocarse en el fortalecimiento y ampliación de los planes y programas de salud local.
“Trabajar en lo que se ha construido, mantener la cercanía con la población, ir casa por casa, crear espacios de salud y tener esa coordinación con el IMSS Bienestar para garantizar que las personas que necesitan asistencia médica sean referidas y acompañadas. Estar en toda la ciudad, en los lugares donde hay más rezagos, con una visión de ser una ciudad que produce salud”, apuntó.
Dijo que genera además la oportunidad de construir dentro del sector salud que se plantea para el segundo piso de la Cuarta Transformación en la ciudad el sistema público de cuidados que propuso la jefa de gobierno electa, Clara Brugada Molina, en el eje de prevención y promoción.
López Arellano refirió que en el proceso de transición al IMSS Bienestar, la parte operativa ya está a cargo del subsistema y “lo importante es que la gente sepa que tiene su servicio garantizado, es gratuito, es universal, hemos estado mejorando la calidad a través de mayor equipamiento, de contrataciones con mejores condiciones laborales del personal que se basifica y también por otro lado hay todo un esfuerzo del trabajo territorial de seguir ampliando toda la actividad de detección temprana a cargo de la Sedesa, lo que se llama rectoría, acciones colectivas, trabajo comunitario y también lo que tiene que ver con funciones esenciales de salud”.
Son dijo, los dos grandes pilares de esta transformación radical en salud, el eje vertical, configurado a partir del IMSS Bienestar, que centraliza todos los servicios de atención médica, en un solo subsistema de atención para población sin seguridad social laboral y el eje horizontal, que es todo el trabajo de las secretarías de salud locales, como autoridad sanitaria, y que van a poder expandir su actividad territorial de salud pública, de acciones colectivas , de participación comunitaria , de atención casa a casa, “porque ya no van a estar teniendo la atención médica que siempre es una urgencia y es contingente, se van a centrar en estas tareas más estrategias de conducción del sistema de salud”.
El volumen 66, número 5, septiembre-octubre de Salud Pública de México, con el dossier “La transformación del sistema público de salud en México” (https://saludpublica.mx/index.php/spm/issue/view/552), que presentaron López Arellano y Gasman Zylbermann, junto con Ruy López Ridaura, Subsecretario de Prevención y Promoción de Salud; Eduardo Lazcano Ponce, director del Instituto Nacional de Salud Pública; Sergio López Moreno, académico del Departamento de Atención a la Salud de la UAM Unidad Xochimilco y Víctor Hugo Borja Aburto, titular de la Unidad de Atención a la Salud del IMSS Bienestar, contiene 20 colaboraciones sobre el tema.