La actividad del volcán de fuego en Guatemala, uno de los más activos de Centroamérica, ha aumentado recientemente con la emisión de columnas de lava, ceniza y rocas. Esta erupción ha causado la evacuación de cerca de 900 personas, principalmente de las comunidades de El Porvenir y Las Lajitas, ubicadas en el municipio de Alotenango, al suroeste de la capital guatemalteca. El gobierno de Guatemala ha declarado alerta naranja y suspendido las clases en Alotenango debido a los peligros que representa la actividad volcánica, como los flujos piroclásticos (mezcla de gases, ceniza y bloques de roca a altas temperaturas) que descienden rápidamente por las laderas del volcán.
Según el vulcanólogo Ernesto Velázquez López, la ceniza generada por esta erupción podría ser dispersada por los vientos hacia la región Soconusco en Chiapas. Sin embargo, señala que no se espera que el impacto sea significativo para la salud de la población de la región.
Las imágenes satelitales muestran columnas de humo de color rosa o rojiza, y aunque los vientos predominantes en la zona podrían dirigir parte de esta ceniza hacia el suroeste y el oeste-noroeste, la dispersión es limitada, y por la altura no se prevé que afecte las actividades cotidianas en territorio chiapaneco.
El especialista agregó que, aunque no se ha reportado caída de ceniza en las regiones de Soconusco, Sierra, Meseta Comiteca y Selva de Chiapas, es importante mantenerse informados a través de las autoridades de Protección Civil, quienes son las encargadas de emitir recomendaciones oficiales. En caso de que la ceniza llegue a estas áreas, se recomienda el uso de cubrebocas y evitar actividades al aire libre.
El volcán de fuego sigue con actividad, y los vientos podrían dirigir, en parte de la altura, hacia Chiapas. Lo importante es estar atentos a la información del sistema estatal de PC y no caer en información falsaErnesto Velázquez, vulcanólogo
A pesar de la actividad volcánica, el vulcanólogo enfatizó que no es motivo de alarma en este momento. Sin embargo, es fundamental estar atentos a las condiciones meteorológicas y seguir las pautas de Protección Civil para prevenir cualquier riesgo potencial para la salud.
La erupción del volcán de Fuego en Guatemala recuerda la devastadora tragedia de junio de 2018, cuando una avalancha de material volcánico arrasó la comunidad de San Miguel Los Lotes, en Escuintla, y dejó más de 200 muertos y una cifra similar de desaparecidos. Aunque la situación actual no se compara en magnitud, las autoridades continúan monitoreando la actividad volcánica de cerca para prevenir posibles desastres.