La marea roja se ubica entre Sisal y Celestún y registra un aumento abundante de las algas Rhizosolenia sp. que, al reducir la cantidad de oxígeno, amenazan a las especies marinas y, al degradar la calidad del agua marina, podrían ser un peligro para las costas de Yucatán, advierte el Laboratorio de Producción Primaria del Centro de Investigación y de Estudios Avanzados (Cinvestav) en Mérida.
Preguntado sobre si las personas pueden comer los pulpos y peces que recalan en playas de Progreso desde hace días, el Dr. Jorge Herrera Silveira, responsable del Laboratorio de Producción Primaria, respondió a Diario de Yucatán que es difícil de saber si no se hace un examen adecuado de los ejemplares.
En Progreso ya recalaron peces muertes y pulpos vivos de fines de julio a la fecha.
Tercer muestreo científico de la marea roja en Yucatán en 2025
Hoy miércoles 6 de agosto, el Laboratorio reporta que debido a que durante la última semana de julio, se observaron peces muertos en playas de Progreso, el 1 de agosto se hizo un tercer muestreo como parte del Programa de Investigación y Monitoreo de Florecimientos de Algas Nocivas (FAN): a 20 km de Progreso recolectaron agua y algas, y midieron variables fisicoquímicas del agua.
Ya en el laboratorio, en Mérida, realizaron la cuantificación, identificación y clasificación de las algas, como nocivas o no tóxicas.
Aumenta hasta 336 veces la concentración de algas
Como resultado, indica el Laboratorio, este tercer muestreo detectó un abundante florecimiento de la diatomea Rhizosolenia sp., especie que hasta ahora no había sido catalogada como formadora de FAN (nombre formal de la marea roja), con “hasta 897,372 células por litro (de agua marina), asociadas a zonas con bajo oxígeno disuelto, lo que podría representar un riesgo ecológico”.
Se trata de un aumento de hasta 336 veces la cantidad registrada el 12 de junio de 2024 frente a Dzilam de Bravo, Yucatán, que según el mismo Laboratorio fue de 2,670 a 72,090 células de Rhizosolenia sp. por litro.
Actualmente, la Rhizosolenia sp. frente a Progreso es potencialmente nociva para las costas de Yucatán, por su elevada abundancia y por las bajas concentraciones de oxígeno disuelto en el agua, sostiene el informe firmado por ocho especialistas encabezados por la maestra Daniela Guadalupe Medina Euán y el doctor Jorge Herrera Silveira.
Asimismo, los investigadores destacan que “estos resultados reflejan degradación de la calidad del agua que se ha puesto de manifiesto en otras ocasiones, y subrayan la necesidad urgente de implementar programas de saneamiento y reducción de descargas de aguas residuales sin tratamiento, para mejorar la calidad del agua costera en la región. Este es un riesgo latente para las actividades turísticas que se están impulsando”.
Específicamente, el tercer muestreo de la marea roja frente a Yucatán en 2025 arrojó los siguientes resultados:
- La temperatura del agua osciló entre 20.8 y 29.8 grados Celsius.
- El oxígeno disuelto (OD) estuvo entre 2.6 y 6.3 miligramos por litro (mg/l). En el primer muestreo, realizado el 8 de julio frente a Telchac y Dzilam, fue de entre 3.2 y 6.3 mg/l.
- La clorofila-a (Cl-a), un pigmento verde esencial para la fotosíntesis en plantas, algas y cianobacterias, varió entre 0.9 y 13.9 microgramos por litro (ug/l). El 8 de julio fue entre 0.9 y 14.5 ug/l.
- La Rhizosolenia sp., un alga de color marrón, es la especie dominante en el fondo, con valores entre 7,122 y 897,372 cel/l. El 8 de julio fueron dominantes las diatomeas Chaetoceros sp. y Rhizosolenia sp.
Sobre el OD, la Universidad Complutense de Madrid explica que un sistema acuático debe tener oxígeno disuelto (OD) de 5 a 6 mg/l para que haya oxígeno suficiente para la mayor parte de las especies; menor de 3 mg/h es dañino porque el ecosistema experimenta hipoxia, y debajo de 2 mg/l es fatal para la mayoría de las especies porque el ecosistema sufre anoxia; este último escenario es considerado una zona muerta.
Según esos datos, las especies marinas ya sufren de hipoxia y la marea roja frente a Yucatán está a punto de convertir una o más franjas, aquellas donde hay 2.6 miligramos de oxígeno por litro de agua, en zonas muertas, como ocurrió con el FAN que en 2022 recorrió la costa yucateca.