De los 74 templos, parroquias y conventos que se localizan en el Centro Histórico de Puebla 38 tienen un riesgo alto ante sismos, de acuerdo con la evaluación realizada por la Arquidiócesis poblana y que fue incluida en el Protocolo de Contingencia para esa zona de la ciudad, documento diseñado por el gobierno capitalino y la Universidad Iberoamericana (IBERO).
El instrumento disponible para consulta pública indica que los inmuebles de tipo religioso son de los que presentan mayor susceptibilidad ante movimientos telúricos, debido a la edad de las construcciones, a que han presentado derrumbes o afectaciones en sismos previos y tienen un aforo de personas alto en determinadas fechas, sin contar con los medios adecuados de evacuación en caso de emergencias.
“La mayoría de los templos tienen un solo acceso, algunos han tapado o bloqueado los accesos existentes y las puertas no funcionan bien por desgaste o peso”, se señala en el protocolo.
Los inmuebles catalogados con riesgo alto son los templos de San Agustín, Santa Anita, Nuestra Señora de los Remedios, Nuestra Señora del Carmen, Santa Catalina de Siena, De María La Concepción, La Concordia, Santo Domingo, La Compañía, San Francisco de Asís, Santa Inés, Santa Inés Montepuicianno, La Concordia, San Juan del Río, La Santa Cruz, Monasterio San Salvador y Nuestra Señora de la Luz.
Asimismo, el convento Dominicas Santa Catalina, Santo Ángel Custodio en Analco, Nuestra Señora de los Dolores, Siervas del Sagrado Corazón de Jesús, Carmelitas Descalzas, Parroquia de San José, El Señor de las Maravillas, San Juan de Dios, Parroquia de Santa Clara, Catedral, Santa Teresa, Santa Rosa, San Juan de Letrán (El Hospitalito), el convento de San Joaquín y Santa Ana, Capuchinas, Sagrario Metropolitano y Sagrario Apóstol.
Finalmente, también están catalogados en este nivel de riesgo los templos de San Sebastián y Nuestra señora de Guadalupe, Nuestra señora de los Dolores, Nuestra señora de la Merced, Señor de los Trabajos, Sagrado Corazón de Jesús, Capilla de la Inmaculada Concepción de María, Nuestra señora del Refugio, San Miguel Arcángel y San Pablo de los Frailes.
Respecto a las afectaciones que han registrado, se precisa que “los principales daños se presentaron en el colapso por fallas a cortante y torsión de elementos de remate en las secciones más altas de los elementos de techo, como las linternillas y espadañas. Además se presentan daños por cortante en elementos esbeltos como las torres campanario, grietas por fallas a cortante en los muros de mampostería y contrafuertes”.
De acuerdo con la evaluación, otros 17 inmuebles de tipo religioso presentan riesgo medio y ocho un grado de riesgo bajo ante sismos, debido principalmente a que sus aforos son menores o tienen menor actividad.
Ante este panorama, se sugiere examinar el cumplimiento de especificaciones relacionadas a la comunicación, evacuación y prevención de emergencias, así como de integración al contexto e imagen urbana, a fin de mejorar aspectos como la señalización e iluminación de emergencia, zonas de menor riesgo y puntos de reunión.
El protocolo de contingencia para el Centro Histórico de Puebla fue presentado en el marco del aniversario 36 de la inscripción de dicho polígono en la lista de Patrimonio Mundial de la UNESCO, es único en su tipo a nivel estatal y reúne las estrategias y acciones a realizar en la zona de monumentos durante las fases de prevención, atención a emergencias y recuperación en futuros sismos.