Petróleos Mexicanos (PEMEX) prepara los trabajos de perforación de un pozo a 8 mil 300 metros de profundidad en el campo Sitio Grande, en Reforma, Chiapas, en donde tiene altas expectativas de descubrir un súper campo, así lo informó el director general de la empresa, Octavio Romero Oropeza.
Romero Oropeza indicó que con la nueva sísmica que están levantando se anticipa que en objetivos más profundos al campo Sitio Grande hay muy buenas posibilidades de obtener más recursos, por lo que en los próximos días se iniciará con la perforación de un pozo de sondeo.
Ante esta acción, el subdirector de PEMEX Exploración, Leonardo Aguilera Gómez, detalló que el pozo que se va a perforar es el de Sitio Grande 2001, con el que cual se va a evaluar el terreno por debajo del campo ya conocido.
El subdirector explicó que la perforación de los 8 mil 300 metros de profundidad es tres mil metros más profundos al de los pozos que hay actualmente en el campo original y se estima que puede haber un recurso prospectivo de 148 millones de barriles de petróleo crudo equivalente.
En el marco de una visita al campo Sitio Grande, Romero Oropeza recordó que en Ixachi el campo productor original era Perdiz, debajo de éste, a más de 8 mil metros, se encontró un súper campo de Ixachi. Mientras que en Tupilco, el campo original era Tupilco somero y a 7 mil 500 metros encontraron Tupilco Profundo.
“Este es el concepto que se busca en Sitio Grande; un yacimiento por debajo de los 8 mil metros y al igual que en otros desarrollos tempranos tenemos la infraestructura muy cerca por lo que podríamos desarrollar muy rápidamente en la lógica de la producción temprana”, destacó.
Los trabajos en este campo se iniciarán a finales de abril y se estima que terminarán en 140 días con los resultados de la investigación.
El subdirector de Proyectos de Exploración Estratégicos de PEMEX, Víctor Gerardo Vallejo Arrieta, indicó que cuentan con toda la ingeniería, los trazos y están trabajando con los permisos, además de que tienen un plan de construcción acelerada para terminar una localización del crudo en menos de 60 días.
