Alejandro Armenta Mier descartó cualquier intención de contender por la presidencia de México en el proceso electoral de 2030, asegurando que está “consagrado” a la gubernatura y no utiliza su cargo para construir una plataforma política nacional.
Durante este lunes atajó los señalamientos mediáticos que lo vinculan con una aspiración presidencial a futuro, haciendo énfasis en que “no está haciendo vaquita”, con el lema que encabeza su gobierno de “Pensar en Grande”.
“No tengo interés de ninguna otra cosa (…) Esta, para mí, es el sueño de mi vida, es por lo que luché y es en lo que creo, servir a Puebla, no estoy haciendo ‘vaquita’ como el que saqueó el estado para hacer su campaña presidencial”, afirmó.
A pocos días de cumplir su primer año en el cargo, señaló que su prioridad es cumplir la promesa de ser un “gobernador honesto”, toda vez que hasta la fecha, argumentó que no se ha corrompido.
El titular del Ejecutivo estatal sostuvo que ha sido intolerante a la corrupción y al abuso de poder, y que la gubernatura de Puebla representa su máximo logro, sin distracciones en otro tipo de candidaturas.
“Lo puedo decir frente a quien sea, no me he corrompido. Ser justo, aplicar la ley, hasta hoy lo he sido”, aseveró.
Concluyó en que se acerca a su primer informe con resultados concretos y que su objetivo es maximizar los logros en el resto de su sexenio, reafirmando que no permitirá que intereses personales o ambiciones políticas lo aparten de su gestión en Puebla.
