Debido a las condiciones climatológicas como descenso de temperatura, viento y lluvia, llegaron menos feligreses al Santuario de Nuestra Señora de Guadalupe.
A las 7:30 horas se programó la primera misa del día como parte de los festejos a la virgen del Tepeyac en el Santuario de Nuestra Señora de Guadalupe en Cancún, en este evento asistió muy poca gente, estaban ocupados cerca del 70 por ciento de los lugares en el interior del recinto sagrado.
La iglesia ubicada detrás del Mercado el Parían lucía con ausencia de feligreses, pero quienes se encontraban en la zona fueron los vendedores que se quedaron a hacer guardia durante toda la noche, nuevamente montaron sus puestos para ver si en la mañana lograban sacar un poco de venta ya que previamente durante la “misa de gallo”, no les fue bien.
Abel López, de 50 años, es vendedor de artículos religiosos y señaló que durante la noche no logró la venta que esperaba y en comparación con el año anterior si hubo una gran diferencia de ventas debido a la ausencia de la gente, atribuyó al clima.
“No llegaron peregrinaciones, cayó entre semana y la gente labora, hoy es el día bueno pero la última misa es a las 6:00, el frío también, mira cómo andamos abrigados, el año pasado había muchos niños disfrazados de ‘inditos’ y hoy solo he visto pasar una familia”, dijo el ciudadano.
Ciertamente en la primera misa solo había un niño vestido como San Juan Diego y la misa comenzó pero había muchos espacios en los asientos.
Para el Padre Rafael Ruiz, que está a cargo del Santuario de Nuestra Señora de Guadalupe, es importante que la gente asista a los eventos católicos de celebración, pues es una prioridad con Dios.
“Debemos de darnos cuenta que hay una jerarquía siempre, el primer mandamiento dice ‘Amar a Dios, sobre todas las cosas’, por otra parte también debemos de mencionar que las apariciones de la santísima Virgen de Guadalupe son un muestra del amor de Dios, porque manda a su propia madre en un momento en que México lo necesita”, dijo el padre.
Además dijo que las condiciones climáticas, así como si la fecha cayera entre semana no deberían ser pretexto para asistir a los eventos de la iglesia y la fe católica.
“Vemos cómo m ha producido siempre muy buenos frutos, entonces el clima no es excusa porque llovió un ratito nada más, y el día tiene 24 horas entonces dedicarle una hora a nuestro señor, no es mucho”.
Durante la primera misa se notó la poca presencia de menores, y por ende de las familias, como principal causa el clima con lluvia, aire y descenso de la temperatura que ha hecho que hasta el momento no se efectúen visitas.
Durante la mañana no llegó ningún grupo de antorchistas marianos guadalupanos, durante esta primera misa, mientras que el año pasado llegaban cada 10 minutos y recibían bendiciones en la iglesia.