Ante el financiamiento del gobierno de Estados Unidos que recibe la organización Mexicanos contra la Corrupción, el presidente Andrés Manuel López Obrador anunció que su gobierno actuará en dos vertientes: le enviará una carta a su homólogo estadunidense, Joe Biden, explicándole la inconformidad por esta aportación a un organismo opositor en México que complementará a la nota diplomática que presentará la Secretaría de Relaciones Exteriores protestando por la injerencia en la política en México.
En paralelo, anunció que solicitará a la Procuraduría Fiscal y al Servicio de Administración Tributaria que lleve a cabo una revisión sobre estos donativos de empresas y organismos internacionales para ver si se ajustan a lo que establecen las leyes y que presenten un informe.
López Obrador dijo que aún estaba en tiempo para promover reformas legales que regulen el financiamiento a este tipo de organizaciones a través de donativos que son deducibles de impuestos por parte de personas físicas y morales. Sugirió que se podría impulsar una reforma para evitar abusos en la figura de aportaciones a estas organizaciones.
Todo esto “para que no sea con recursos del mismo pueblo que se lleven a cabo campañas en contra de los intereses de la mayoría de los mexicanos, porque cuando se deducen impuestos por donativos “son ingresos que no llegan a la Hacienda pública que no pueden utilizarse para el desarrollo del país en beneficio de todos los mexicanos sino que cuando se regresan estos recursos se utilizan con propósitos facciosos se está dando un uso indebido al presupuesto y eso lo tenemos que revisar“.