Mérida, Yuc. Concesionarios del transporte público llamado ‘Va y Ven’ dejarán fuera de circulación, gradualmente, a decenas de unidades en los siguientes días, mientras la Agencia del Transporte de Yucatán (ATY), dependiente del Gobierno de Yucatán, no cumpla con una serie de pagos atrasados, no obstante que dicho sistema de movilidad atraviesa por una severa crisis económica en perjuicio de 500 mil usuarios.
El jueves 17 de este mes, los 11 principales concesionarios del transporte público ‘Va y Ven’ decidieron sacar de circulación 149 de un total de 492 unidades, distribuidas en Mérida, la zona metropolitana de esta capital y los municipios de Valladolid y Tizimín, al oriente de la entidad.
Posteriormente, en la noche de ese mismo día los empresarios sostuvieron una reunión con el secretario General de Gobierno, Omar Pérez Avilés, y el director de la ATY, Jacinto Sosa Novelo, para llegar a un arreglo provisional, mientras se cubren los pagos atrasados, aunque tampoco se dieron a conocer cifras del adeudo.
De todas maneras, los empresarios insistieron en que esta medida “no es un recorte extraordinario, es en el segundo turno (servicio después del medio día). También el fin de semana se mantendrá la disminución de autobuses, como suele hacerse”, expuso el representante de los 11 concesionarios, David Quintal Medina.
Y precisó que a partir de este viernes, sábado y domingo se tiene previsto reducir el 40 de las unidades Va y Ven, algo así como 221 camiones y, el lunes 21, a partir de las 10 de la mañana, el 50 por ciento, o sea, 246 unidades del total de 492 en servicio. El registro de usuarios del transporte público en Yucatán es de 500 mil personas.
A pesar de estos recortes en el servicio de movilidad pública urbana, los concesionarios insistieron en que no hacen recortes extraordinarios y que los sábados –como ejemplo- siempre disminuyen el parque vehicular por la demanda que hay. “No estamos cambiando nada ahí”, recalcó David Quintal. “Hemos hecho cálculos con la visión de afectar lo menos posible a las personas usuarias”, explicó.
El empresario resumió la situación actual del transporte: “básicamente se trata de que la ATY ha dejado de pagar el kilometraje por las rutas de circulación”. Pero declinó dar cifras del adeudo que tiene el Gobierno estatal con los 11 concesionarios.
Por su parte, Pérez Avilés dijo que uno de los primeros acuerdos alcanzados fue la garantía de mantener el servicio de transporte al 100 por ciento durante las horas pico (desde las 5 de la mañana y hasta el medio día), medida que beneficiará a miles de usuarios que utilizan el sistema para desplazarse diariamente.
Por su parte, el titular de la ATY, Jacinto Sosa Novelo, subrayó la importancia de mantener este espacio de diálogo continuo entre el Gobierno del Estado y los concesionarios, como mecanismo clave para atender los desafíos del sector.
Algo de historia
En marzo de este año, Sosa Novelo presentó su primer informe sobre las malas condiciones financieras, técnicas y de operación, lo cual hace insostenible el sistema ‘Va y Ven’.
Ante diputados expuso que hasta ese momento había una pérdida de 663 millones 400 mil pesos, en cifras cerradas y que, al final de 2025, el déficit sería de casi 1,858 millones. “El modelo es insostenible, sólo es negocio para un grupo”, acusó el funcionario.
A su vez, el mandatario Joaquín Díaz Mena dijo, en su momento, que recibió un “irresponsable desastre económico” en esa materia, aunque tampoco mencionó directamente al ex gobernador y ahora senador panista Mauricio Vila Dosal, considerado el principal promotor del sistema Va y Ven, quien prometió en su momento un sistema de movilidad de vanguardia para las y los yucatecos.