En el Estado, de los seis incendios forestales que Protección Civil mantiene vigilancia se lograron contrarrestar dos, pero aún siguen activos cuatro en municipios del sur.
Los incendios forestales que están activos, dos se encuentran en Bacalar y dos más en José María Morelos, confirmó el titular de Protección Civil de Quintana Roo, Guillermo Núñez Leal.
Explicó que están trabajando en la mitigación de mil 700 hectáreas de afectación en ambos municipios en coordinación con la Comisión Nacional Forestal (Conafor), la Secretaría de Marina (Semar), Bomberos y la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), a través de brigadas comunitarias.
Para el Coordinador Estatal de Protección Civil varios de estos incendios son provocados por varios factores, uno de ellos, son las quemas controladas, es decir, iniciadas por el humano intencionalmente para otras labores como la agricultura o aprovechamiento forestal, pero que al no estar pendiente de los pronósticos de temperatura y rachas de viento, se propagan hasta salirse de control.
Otro de los factores es la participación de cazadores en la selva, que pernoctan por varios días y en ocasiones producen fogatas que no apagan correctamente y propician incendios forestales, además de las colillas de cigarro que arrojan automovilistas en las carreteras estatales y también por el efecto lupa, que es provocado por las fuertes temperaturas que se ponen en contacto con elementos de vidrio o flamables e inician incendios.
“Estos son quemas controladas, a veces por no estar al pendiente de nuestros pronósticos de vientos y temperaturas, es lo que a veces ocasiona que se propague el incendio y se salga el control. Dos, tenemos a los cazadores. Tres, pues tenemos las colillas de cigarro que a veces se tiran”, dijo Guillermo Núñez Leal.
El funcionario señaló que la temporada de incendios inició desde enero de este año, pero que la temporada más alta relacionada con las altas temperaturas es desde abril hasta junio, cuando concluye el período de vigilancia.