Alrededor de 100 viviendas fueron derribadas en un operativo de recuperación de 32.97 hectáreas de suelo de conservación en el paraje Xatlaco, en el cerro de Guadalupe, alcaldía Tláhuac, encabezado por la Secretaría de Medio Ambiente (Sedema) a través de la Comisión de Recursos Naturales y Desarrollo Rural (Corenadr), con apoyo de la Secretaría de Seguridad Ciudadana.
En las viviendas habitaban aproximadamente 200 familias, quienes señalaron que no son invasores, sino propietarios ejidales, y destacaron que esas tierras están ocupadas desde hace cuatro generaciones.
Henesi Noguerón, una de las afectadas que habitó en el lugar por más de 10 años, mencionó que a las 6 de la mañana comenzó la diligencia, la cual los tomó por sorpresa, sobre todo el gran despliegue policiaco que se realizó.
Dijo que la acción se llevó a cabo sin mostrar ningún papel, y a pesar de que hicieron hincapié en que podían mostrar documentos que acreditan la antigüedad de la propiedad antes del derribo, no fueron considerados.
Indicó que les dieron la opción de acudir hoy al Instituto de Vivienda de la Ciudad de México para registrarse y apoyarlos a construir en otro lugar, pero no hay dinero y muchos ya no tenemos dónde vivir, por eso construimos en nuestros terrenos.
Añadió que desde hace 16 años se llevaba a cabo un trámite en el que se solicitó un permiso de uso de suelo ante el gobierno federal y ante Corenadr, la cual desde hace un mes nos dio la esperanza de que en cuatro o cinco años tendríamos la posibilidad de uso de suelo.
Tenían esperanza de lograr la regularización
Algunos de los afectados tuvieron que trasladar sus pertenencias a domicilios de familiares y en otros casos se pidió apoyo a los vecinos vía WhatsApp para ofrecer algún espacio en sus viviendas a las personas que fueron desalojadas.
El sacerdote de la parroquia Nuestra Señora de Monserrat, Larry Cervantes, expuso que en algunos casos las personas que habitaban el predio compraron terrenos a los dueños anteriores confiando en que a pesar de ser suelo de conservación se iba a regularizar.
El lugar se mantuvo cercado por elementos policiacos por más 10 horas y el despliegue se extendió hasta el Eje 10 Sur y avenida Tláhuac.
Por la noche, la Sedema informó que adicionalmente se iniciaron trabajos de restauración ecológica en otras 98.91 hectáreas de áreas verdes aledañas al predio que fue desalojado, las cuales se han degradado por el crecimiento de asentamientos irregulares.
En el dispositivo participaron las secretarías de Obras y Servicios, de Gobierno, de Gestión Integral de Riesgos y Protección Civil, de Planeación, Ordenamiento Territorial y Coordinación Metropolitana, así como la Fiscalía General de Justicia de la Ciudad de México.
Asimismo, se contó con la supervisión de la Comisión de Derechos Humanos de la Ciudad de México, así como la participación de la Secretaría de Vivienda de la Ciudad de México, la Consejería Jurídica y de Servicios Legales y la Secretaría de Bienestar e Igualdad Social.