Luego de tres semanas de bloqueo ante la ola migrante, la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos (CBP) anunció que a partir de este martes, el Puente de Las Américas, en la frontera de Ciudad Juárez (Chihuahua) y Texas, reanudará actividades de procesamiento de carga, pero con horarios limitados de ocho horas diarias. Al suspender las operaciones, los agentes aduanales ayudaron a la patrulla fronteriza estadounidense a procesar a los miles de migrantes que se entregaron en el bordo del río Bravo para solicitar asilo político, sin embargo, el cierre de esta importante vía de exportación ha ocasionado pérdidas millonarias por 1.900 millones de dólares, de acuerdo con los transportistas mexicanos.
La reapertura del carril de carga en el Puente Internacional Córdova-De las Américas supone un balón de oxígeno ante el retraso de cientos de camiones de carga que aguardan del lado mexicano para cruzar a Estados Unidos. Aunado al cierre de operaciones en dicho puente, la presencia del Departamento de Seguridad Pública del Estado de Texas y sus exhaustivas revisiones han generado 19.000 embarques varados, entre mercancías de la industria manufacturera y retrasos en los cruces de cárnicos y otros alimentos para los supermercados. También se informó que esta crisis migrante registrada en ambas ciudades fronterizas, trajo como consecuencia la escasez de productos de procedencia extranjera que son comercializados en las tiendas comerciales de Ciudad Juárez
El horario de las instalaciones será de 6.00 horas a 14.00 horas, de lunes a viernes. A pesar de esta medida, la CBP alentó a los miembros de la comunidad comercial a considerar otras instalaciones de carga comercial cercanas ubicadas en los puertos de Ysleta, Marcelino Serna (Tornillo) y Santa Teresa. La CBP aseguró que estas acciones son planificadas para apoyar la misión general de la agencia en cuanto a la seguridad y operatividad de las aduanas y fronteras estadounidenses. La instancia estadounidense recordó que forma parte del Departamento de Seguridad Nacional que se encarga de la gestión, el control y la protección integrales de las fronteras, “combinando aduanas, inmigración, seguridad fronteriza y protección agrícola en y entre los puertos de entrada oficiales”.
Ante el creciente número de migrantes intentando cruzar a territorio estadounidense, el Estado de Texas ha endurecido las revisiones aduaneras en la frontera norte y con ello se ha ralentizado el paso de hasta 10.000 de camiones de carga con exportaciones e importaciones. El batacazo al comercio binacional por la crisis migrante ocurre en un periodo en el que México se ha posicionado como el principal socio comercial de EE UU, superando incluso a China y Canadá. Durante el primer semestre de este año, las empresas mexicanas enviaron mercancías a territorio estadounidense por un valor récord de 236.000 millones de dólares, un aumento del 5,4% respecto al mismo periodo de 2022, según las cifras oficiales de Estados Unidos.
México presentará una nueva nota diplomática a Estados Unidos para quejarse por las acciones emprendidas por el Gobierno de Texas en la frontera. El presidente, Andrés Manuel López Obrador, aseguró que hay una creciente hostilidad del gobernador texano, Greg Abbott. “Hay una actitud muy hostil de parte del gobernador de Texas y está complicando más la situación migratoria con propósitos politiqueros. Están poniendo retenes del lado estadunidense para que no haya tránsito fluido en mercancías de Estados Unidos a México y de México a Estados Unidos”, sostuvo.
