El presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel, dijo este lunes que su Gobierno está dispuesto a “dialogar” con los manifestantes y criticó a Estados Unidos, un día después de que cientos de cubanos salieron a las calles para denunciar el empeoramiento de las condiciones en la isla.
En al menos cuatro ciudades, los manifestantes salieron a las calles este domingo para rechazar los extensos cortes de energía que duran horas y la creciente escasez de alimentos. También hubo llamados a las libertades políticas, con coros de “Patria y Vida”, en referencia al populaar himno antigubernamental.
Cientos de personas protestaron en Santiago de Cuba, conocida como la cuna de la revolución de Fidel Castro, mientras el secretario local del Partido Comunista intentaba dirigirse a la multitud desde una azotea.
En un comunicado este lunes, Díaz-Canel dijo que “la disposición de las autoridades del Partido, del Estado y del Gobierno es atender las quejas de nuestro pueblo, escuchar, dialogar, explicar los múltiples esfuerzos que se están realizando para mejorar la situación, siempre en un ambiente de tranquilidad.
Luego culpó a los “terroristas” de la comunidad de exiliados cubanos de Miami por incitar vía Internet a los manifestantes y por las sanciones estadounidenses a la cada vez más sombría economía de Cuba
La creciente inflación ha devaluado masivamente el peso cubano y muchos salarios estatales ahora valen menos que el costo de un cartón de huevos. En marzo, el Gobierno aumentó el precio del combustible más de un 500%, devastando aún más los bolsillos de los ciudadanos.
En ese contexto, la isla ha experimentado frecuentes cortes de energía y escasez de alimentos, combustible y medicinas desde la pandemia de covid-19, lo que llevó a los cubanos a huir a Estados Unidos en cantidades récord.
Los diplomáticos de EE.UU. dijeron el domingo que vigilan las protestas y pidieron al Gobierno de Cuba que escuche a los manifestantes. “Instamos al Gobierno de Cuba a respetar los derechos humanos de los manifestantes y abordar las necesidades legítimas del pueblo cubano”, publicó la embajada de Estados Unidos en La Habana en X, antes conocido como Twitter.
Las protestas espontáneas parecieron disiparse de la noche a la mañana cuando los manifestantes informaron de una fuerte presencia policial y de detenciones a algunos de los que participaban en las protestas. El Gobierno de Cuba, que normalmente no permite la disidencia organizada, no dijo cuántos manifestantes habían sido arrestados.
Después de las protestas en toda la isla del 11 de julio de 2021, más de 1.000 cubanos fueron juzgados y condenados por rebelarse contra el Gobierno comunista, según grupos de derechos humanos.