Aunque hace unos días el Instituto Nacional de Migración (INM), alardeó de un “rescate humanitario” de 2 mil 501 migrantes extranjeros en Puebla durante enero. Para este 5 de febrero, un grupo de migrantes denunció que agentes del mismo organismo los golpearon, les dieron choques eléctricos y separaron a los niños de sus padres. Hasta el momento, las autoridades no se han pronunciado por este último caso.
Fue el pasado 2 de febrero, cuando el INM a través de un comunicado de prensa, informó que en enero “ayudaron” a 306 mujeres, 989 hombres (que viajaban solos), mil 205 personas distribuidas en 292 núcleos familiares y un menor de edad que no iba acompañado. Indicaron que esto se logró con elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), Guardia Nacional (GN), policías estatales y municipales.
Los migrantes “auxiliados” fueron canalizados a instalaciones del Instituto o al Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF), según el caso. Se pudo corroborar que las más de 2 mil personas provenían de 36 países y se contabilizaron 520 personas provenientes de Venezuela; de Honduras, 402; Guatemala, 315; Ecuador, 319; Haití, 212; Cuba, 163; Guinea, 89; Colombia, 76; Nicaragua, 75; República Dominicana, 71; El Salvador, 69; Senegal, 28.
De Afganistán, 24 personas; Chile, 16; Brasil, 15; China, 14; Angola y Perú, 13 respectivamente; Chad, 11; Kazajistán y Pakistán, nueve cada uno; Togo y Uzbekistán, cinco por cada país; cuatro originarios de Etiopía; Bolivia, Camerún, Sudan, tres respectivamente; del Congo, Guinea Ecuatorial, Ghana, Madagascar, Vietnam y Yemen, dos personas por país y de Benín, Eritrea y Mauritania una persona por cada uno.
Derivado de lo anterior, la Fiscalía General de la República (FGR) inició carpetas de investigación por el probable delito de tráfico de personas y cinco personas mexicanas fueron vinculadas a proceso por su probable responsabilidad en dicho delito; además, las autoridades competentes aseguraron seis vehículos y un inmueble.
Migrantes denuncian trato violento y abuso de fuerza en Palmar de Bravo
En contraste con la anterior información, este 5 de febrero, se dio a conocer a través de redes sociales, que alrededor de 300 migrantes, fueron interceptados el fin de semana en el municipio de Palmar de Bravo por agentes migratorios, Sin embargo, el trato de estos servidores fue inhumano y, aseguraron, que les dieron descargas eléctricas y fueron golpeados.
“Por favor, todos mis hijos se jalaron para acá y no sé en dónde están. Mis niñas, mi esposo me lo golpearon todo, me lo reventaron de la boca, fueron los de migración (…) por qué hicieron eso, por qué”, externó una mujer en uno de los vídeos.
“Nos encontramos en alguna parte de Palmar, de Puebla. Fuimos agredidos con nuestros niños, fuimos golpeados brutalmente señores y pedimos ayuda, por amor de Dios. A mí me dieron patadas, mi hijo me tuvo que ayudar y fueron muchos niños los que agarraron, les pedimos que nos ayuden porque estamos mal”, dijo otra mujer.
En los videos, los migrantes aseguraron que los integrantes del Instituto primero les ofrecieron ayuda, pero que los hicieron caminar varias horas en la madrugada y cuando estuvieron alejados de las comunidades, fue cuando comenzó el acto violento. Sin embargo, ni el Gobierno Estatal ni el INM se ha pronunciado por este caso y se desconoce el estado de los migrantes.
