La Pequeña Amal se ha convertido en un símbolo mundial de los derechos humanos, especialmente de la infancia. Su mensaje clave es: “No se olviden de nosotros”.
Tras su arribo el pasado 6 de noviembre a la ciudad de Tijuana, la marioneta de 3.6 metros de altura, que representa a niñas y niños refugiados o desplazados por guerras internas o conflictos internacionales, continúa viajando por ciudades mexicanas a lo largo del territorio, hasta Tapachula, para reunirse con diversas comunidades, figuras públicas y agrupaciones artísticas en una treintena de actividades organizadas para darle la bienvenida.
Acompañada siempre de grupos artísticos en su andar, el día de ayer La Pequeña Amal estuvo en Guadalajara para participar en la 42 Muestra Nacional de Teatro y jugar en el parque con otros pequeños; mientras el día de hoy (15 de noviembre) estará en Zapopan asistiendo al “Festival Internacional de Teatro y Tradiciones Nativo Americanas” y luego hacer una reflexión frente a la Basílica de Nuestra Señora de Zapopan, cuya imagen es un icono de fe para los migrantes de la región.
La Ciudad de México la recibirá entre el 17 y el 21 de noviembre, donde se encontrará con la comunidad estudiantil y académica de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), visitará el centro histórico de la capital y los canales de Xochimilco -ambos sitios declarados Patrimonio Cultural de la Humanidad-, así como el Complejo Cultural Los Pinos, un centro social en Iztapalapa y, por último, la Cámara de Diputados.
En su travesía por México, que ha tocado las ciudades de Tijuana y Monterrey, y continuará por Guadalajara, Zapopan, Ciudad de México, Oaxaca y Tapachula, se reunirá con niñas, niños, jóvenes, migrantes y refugiados de todas las edades; además de colectivos, que buscan crear conciencia entre la sociedad sobre los momentos difíciles que viven las personas -sobre todo menores- que se ven obligados a abandonar su lugar de origen.
Luego de su estancia en Ciudad de México, Amal se dirigirá a Oaxaca, donde del 22 al 23 del mes paseará por las coloridas calles del centro histórico, la zona arqueológica de Monte Albán e intentará abrazar al Árbol del Tule, cuyo tronco es el más ancho del orbe.
Del 25 al 26 irá a Tapachula para romper la piñata, compartir con pequeños de un albergue la comida típica de sus países de origen, además de apreciar la belleza natural de la localidad, donde será condecorada y se unirá a las actividades en el marco de los 16 días de activismo en contra de la violencia contra mujeres y niñas.
En su última parada por América, Amal irá a Ciudad Hidalgo, pequeña urbe fronteriza entre México y Guatemala a la que llegan miles de personas diariamente desde Centroamérica.
Origen y significado
La marioneta fue diseñada y construida por Handspring Puppet Company, por encargo de The Walk Productions; es una producción de los británicos David Lan y Tracey Seaward. Amir Nizar Zuabi es el director artístico y Sarah Loader la productora ejecutiva.
Desde julio de 2021, La imagen de la Pequeña Amal encarna a una niña refugiada siria de 10 años y ha recorrido 14 países de Europa y América del Norte llevando un mensaje de paz, esperanza, tolerancia y solidaridad hacia miles de personas que se han visto forzadas a dejar su hogar y sus familias, a causa de las guerras, la violencia y la persecución.
La marioneta de Amal -inspirada en las mojigangas mexicana, según sus diseñadores-, cuyo nombre en lengua árabe significa esperanza, ha cautivado a más de un millón de personas en más de 120 ciudades del mundo desde que emprendió la marcha en Turquía, donde se han refugiado miles de habitantes de Siria, a causa de la guerra civil que comenzó en 2012.
“México, al igual que Estados Unidos, es un país que ha sido moldeado e impactado por una historia de migración. En ambos casos, es una historia de promesas y desafíos”, dice el director artístico de The Walk Productions, Amir Nizar Zuabi.
“También es una historia que se entrelaza a través de sus fronteras, como todos los inmigrantes saben. En México, La Pequeña Amal compartirá su mensaje de esperanza con el pueblo mexicano, así como con los migrantes que actualmente cruzan el país, o con los de generaciones anteriores que han viajado a través de la frontera, en ambas direcciones”.
La gira por México cuenta también con el apoyo de distintas agencias de la ONU, entre ellas, la Agencia de la ONU para los Refugiados (ACNUR), el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF), la Organización Internacional para las Migraciones (OIM/ONU Migración) y la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO).
De acuerdo con ONU-México, La Pequeña Amal representa la vida de millones de niñas, niños y adolescentes desplazados en México y el mundo. “Esperamos que la caminata de Amal por el país sirva para recordarnos que los derechos de niñas, niños y adolescentes deben ser respetados estén donde estén, y nos una en celebración de la diversidad cultural y la solidaridad internacional”.
“Estamos entusiasmados de que Amal pueda conocer la amabilidad y empatía del pueblo mexicano y alentar a todos, tanto allí como en todo el mundo, a enfrentar los problemas relacionados con la inmigración con cuidado y responsabilidad”, plantea David Lan, co-fundador y director de The Walk Productions.
“Durante mucho tiempo hemos creído que los artistas, las comunidades de base y los líderes de la sociedad civil deberían unirse para hacer arte que importe en el mundo real. Amal permite esa unión”, concluyó Lan.
