Ciudad de México. El dirigente local de Morena, Sebastián Ramírez, llamó a la oposición y su precandidato a la jefatura de Gobierno, Santiago Taboada, a dejar de mentir y no utilizar como “botín político” la escasez de agua en la Ciudad de México.
En conferencia de prensa, el morenista aseguró que el recorte en el suministro de agua del Sistema Cutzamala está afectando a los habitantes de todas las alcaldías que dependen de esta fuente, debido a la sequía en la zona centro del país, independientemente de quien esté gobernando, y no sólo en las de oposición, como lo han divulgado.
Comentó que con la llegada del diputado local Federico Döring al equipo Taboada, está claro que la lógica de su campaña será el golpeteo político, pero advirtió que saldrán a responder a cada mentira, pues en su afán de ganar simpatías se han dedicado a falsear información.
“He estado viendo en las redes sociales -especialmente en X- que el señor Taboada se la pasa diciendo puras mentiras, tergiversando la realidad; tiene una campaña que está diseñada por consultores colombianos y venezolanos que ya actuaron en Argentina con Javier Milei. Es una estrategia de decir mentiras, de repetir y repetir mentiras hasta el fin para manipular la voluntad popular y para crear ambientes de odio”.
Por separado, la precandidata de Morena, Partido del Trabajo y el Verde Ecologista, Clara Brugada, afirmó que la escasez de agua en la Ciudad de México se debe a la sequía que se vive en el centro del país, pero también a la voracidad inmobiliaria de políticos corruptos que han provocado que nuevas zonas sufran del desabasto del líquido.
“Hoy las construcciones de edificios han cambiado la composición de las colonias: donde antes había una toma para una casa de una o dos familias, ahora son grandes edificios de 50, 100 o más departamentos; además, se dan licencias irregulares que hacen más grave la escasez en ciertas zonas de la ciudad”, expuso.
Señaló que en su momento expondrá su propuesta hídrica, en la que plantea una alternativa sólida técnica y financieramente, pero sobre todo con una visión humana y de derechos.