Pedro Infante fue la figura más popular en el México de los 50, su canción “La Bartola”, donde dice: “Oye Bartola, ahí te dejo estos dos pesos, pagas la renta, el teléfono y la luz”.
Esta canción reflejaba el ánimo de los mexicanos y no obstante que fue hace 75 años aún se escucha en las zonas populares.
Luego vinieron Jorge Negrete y su canción “México lindo y querido”, símbolo de la mexicanidad en todo el mundo; luego José Alfredo Jiménez, Juan Gabriel, Joan Sebastian y otros más que mostraban el momento mexicano en la música, sin embargo, ninguno igual a Pedro Infante.
Hoy los jóvenes mexicanos se identifican más con la música internacional y los conciertos de grupos extranjeros son cada vez más comunes en las ciudades del país. El México de hoy dista mucho del México de los 50, pero no sólo en la música, también en la economía.
Actualmente, la economía del país es más grande, pero también con más riesgos, con una inflación que se devora el poder adquisitivo, un México rico y a la vez pobre, la desigualdad es la marca, los dos pesos de Bartola ya no alcanzan, hoy se va la luz frecuentemente y se funden los aparatos eléctricos. El México actual no se parece al de Pedro Infante, es un México más cercano a perfiles internacionales, un México de luces y sombras, es un México donde hay que encontrar esa referencia que hacía posible la alegría de la gente, la alegría de ser lo que somos y sobre todo que México siga siendo la casa común de todos los mexicanos, dónde a pesar de nuestras diferencias quepamos todos.
