Los cruces de inmigrantes en la frontera sur entre Estados Unidos y México alcanzaron un récord histórico en septiembre, con más de 260.000 detenciones, según informó un funcionario de Seguridad Nacional.
Este es un récord mensual que jamás había sido registrado por las autoridades fronterizas. La cifra equivale a la población de San Petersburgo, en Florida.
La Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP, por sus siglas en inglés) asegura que Estados Unidos está enfrentando uno de los peores momentos migratorios.
En este sentido, el número de inmigrantes detenidos en la frontera en septiembre incluye los encuentros del CBP entre puertos de entrada y las interacciones de la Oficina de Operaciones sobre el Terreno (OFO) en los puertos.
El récord supera el anterior máximo registrado en diciembre del año pasado, cuando se registraron 252.320 detenciones de inmigrantes.
Un repunte de la llegada de inmigrantes
Aunque la administración del presidente Joe Biden había controlado el flujo de inmigrantes en la frontera sur, en los últimos dos meses se registró un importante repunte.
La CBP reveló que en agosto se contabilizaron hasta 230.000 detenciones de inmigrantes en la frontera sur.
De acuerdo a las cifras de la CBP, en un solo día, ingresan hasta 9.100 inmigrantes de México a Arizona. Mientras que, por el cruce de El Paso, en Texas, entran más de 2.000 inmigrante diariamente.
Las ciudades fronterizas al borde
San Diego, en California, y El Paso, en Texas, son las ciudades fronterizas que han declarado emergencia humanitaria debido a la llegada de los inmigrantes.
Los líderes de estas ciudades solicitaron ayuda federal y estatal para atender la llegada masiva de inmigrantes. En San Diego, por ejemplo, los refugios ya están a su máxima capacidad, y no hay recursos para apoyar a los solicitantes de asilo.
A su vez, la patrulla fronteriza ha tenido que liberar a decenas de inmigrantes en las calles de las ciudades fronterizas por no tener recursos suficientes para atenderlos en los albergues temporales.
