Washington. El secretario de Defensa, Pete Hegseth, y el general Dan Caine redoblaron este jueves la apuesta sobre lo destructivos que habían sido los ataques estadunidenses contra las instalaciones nucleares de Irán y describieron en detalle el estudio y la planificación detrás de la misión de bombardeo, pero no llegaron a detallar en qué medida el ataque retrasó el programa nuclear de la república islámica.
El presidente Donald Trump y su administración han intentado minimizar un informe de inteligencia filtrado previamente que sugiere que los ataques de Washington contra Teherán probablemente retrasaron al país solo unos meses. Hegseth reiteró que el informe era preliminar y que el propio informe reconocía la baja confianza y la existencia de lagunas en la información.
Sacar conclusiones fiables sobre el impacto de los ataques estadunidenses es difícil sólo unos días después de que tuvieron lugar.