Rosy Sinecio

“Una mujer se arrojó a las vías; cerré los ojos y sentí cómo el tren la destrozó”

Solo cinco días de terapia y unas vacaciones recibió Antonio Ramírez, conductor de la Línea 9 del Metro, tras presenciar el momento en que una mujer se arrojó a las vías de la estación Puebla. 

“Te dan de tres a cinco días de descanso por lo que sucede. Si te sientes listo puedes regresar, y si no puedes tomas vacaciones como yo. Tomé un periodo de vacaciones, tomé 10 días”, afirmó Antonio. 

En entrevista con La Verdad Noticias, narra que una de las experiencias más difíciles de superar fue cuando una mujer se arrojó a las vías, cuando el convoy que operaba ingresaba a la estación

“Recuerdo que venía entrando a la estación del Metro Puebla, a unos 55 kilómetros por hora, y a unos 30 metros veo que una persona femenina rebasa la línea amarilla y se arroja a las vías”, dijo.

El primer reflejo de Antonio fue cerrar los ojos. La velocidad del Metro evitó que frenara de golpe, de lo contrario, podría causar un descarrilamiento y pondría en riesgo la vida de los pasajeros.

“Automáticamente activó la llamada de urgencia y siento como el tren golpeó a la señora. Al arrojarse cubrí mi cara por inercia y escucho como la destroza el tren y se hace eterno el trayecto, pero son segundos los que pasan. Son tres o cuatro segundos los que pasan”, afirmó. 

Antonio consideró que “todos los días son un riesgo” y una responsabilidad el operar un tren de más de 200 toneladas con mil 800 personas transportadas.

“Los suicidios no se puede evitar” 

Con 15 años de experiencia, Antonio se desempeña como operador de tren en la Línea 9 del Sistema de Transporte Colectivo (STC) Metro, la cual transportó 24 millones 509 mil 646 usuarios durante el primer trimestre de este año.

Desde su experiencia, afirmó que un suicidio “no se puede evitar” al interior del Metro, a pesar de la presencia de policías y de las cámaras de seguridad. 

“Hay demasiada gente, no sabes cómo está emocionalmente o hay personas que sin deberla mueren. En la Línea 8 había una persona que sufría ataques epilépticos y aventó sin querer a una persona, cayó a las vías y el tren lo arrolló”.

De acuerdo con Antonio, una vez que se activan los protocolos de seguridad, los responsables de las estaciones del STC deben cortar corriente al Regulador PCC, mientras que el conductor es resguardado para recibir atención médica. 

“Depende del personal que esté en el Metro de la estación, porque hay estaciones donde no hay gente y el jefe de estación es el que se encarga en mover el tren y al conductor lo protegen y es llevarlo al servicio médico”, apuntó.

Una vez que se activan los protocolos de rescate, ingresa Seguridad Industrial y Protección Civil, así como el personal médico, quienes son los responsables de rescatar a la persona y evaluar su estado de salud. 

“A mí me retiraron, me llevaron al servicio médico por un trauma y de ahí ya no me enteré de nada (…) te dan ayuda psicológica, te dan ayuda médica, te tranquilizan con medicamento por el shock”, apuntó.

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