La sequía en Querétaro en su nivel más bajo de los últimos cuatro años. Desde el 15 de septiembre de 2021, en que el estado fue declarado libre de cualquier tipo de afectación, no había alcanzado un índice tan alto como el del 15 de junio, en el que el 95% del territorio estatal se encuentra sin problemas de falta de humedad.
De acuerdo con el más reciente informe del Monitor de la Sequía de la Comisión Nacional del Agua (Conagua), al concluir la primera quincena de junio sólo se reporta una afectación del 5% del territorio estatal que enfrenta una condición anormalmente seca, y que corresponde una franja entre los municipios de Jalpan de Serra y Landa de Matamoros.
El concepto de “anormalmente seco” lo aplica la Conagua a una condición de sequedad que no alcanza la categoría de sequía, pero indica un déficit de humedad que puede afectar negativamente a cultivos, pastos o aumentar el riesgo de incendios, aunque aún no se considera una sequía como tal.
En detalle, “anormalmente seco” es una categoría dentro del Monitor de Sequía que se utiliza para identificar áreas que están experimentando condiciones más secas de lo normalpara la época del año, pero que no cumplen con los criterios para ser clasificadas como sequía moderada o superior.
Pero el resto del estado se encuentra sin afectación alguna, algo que no se había presentado desde la primera quincena de septiembre de 2021, antes de que se detonara la sequía más grave que ha enfrentado la entidad desde que se monitorea este fenómeno de manera oficial.
Y es que a partir de esa fecha se ligaron seis quincenas con tres municipios que empezaron a mostrar señales de una condición de déficit de humedad, sin llegar a ser sequía como tal, lo que fue el preámbulo la sequía que se dispararía a partir de marzo de 2022.
De acuerdo con los datos históricos de la Conagua, la situación en el estado de Querétaro se agravó a partir de la segunda quincena de marzo de 2022, cuando 10 de los 18 municipios fueron declarados en condición de sequía severa, tres más en sequía moderada y los restantes cinco anormalmente secos.
Sin embargo, la condición de emergencia se hizo presente hasta la primera quincena de septiembre de 2023, cuando 17 de los 18 municipios alcanzaron la condición de sequía extrema, y sólo Corregidora se mantenía en condición severa.
Y el pico más alto llegaría nueve meses después, en la primera quincena de junio de 2024, cuando la totalidad del territorio queretano fue declarado en condición de sequía excepcional, el grado más alto y que se requiere a pérdidas excepcionales y generalizadas de cultivos o pastos, riesgo excepcional de incendios, escasez total de agua en embalses, arroyos y pozos, y es probable una situación de emergencia debido a la ausencia de agua.
Según los reportes del organismo federal, Querétaro suma ya 30 días de recuperación de sus condiciones de humedad, desterrando cualquier rasgo de sequía de su territorio coincidiendo con las tormentas que se han registrado a partir del inicio de la temporada de lluvias del 15 de mayo.
De modo que para el 30 de mayo, se reportaban cuatro municipios con condiciones anormalmente secas y uno en sequía moderada lo que afectaba al 15% del territorio; y quince días después la situación pasó a sólo dos localidades con condiciones anormalmente secas, lo que involucra al 5% del estado.