En estos días Japón llamó la atención al mundo al nombrar a la primera ministra en su historia patriarcal, su nombre es Sanae Takaichi y se acerca más a una mujer muy dura del estilo de Margaret Thatcher.
Ella es miembro del Partido Liberal Democrático que ha dominado la política japonesa desde la posguerra, casi sin interrupciones; es una veterana de la política nipona, ya que ha sido ministra en varias ocasiones y fue muy cercana al primer ministro Abe que sufrió un magnicidio en 2022 durante un evento de campaña.
Takaichi, con 64 años, es una mujer de contrastes, pues en su juventud fue integrante de una banda de heavy metal y ahora es una mujer ultraconservadora, admiradora de Margaret Thatcher y sobre todo es una adicta al trabajo.
Japón estrena su primera ministra mujer, pero no es exactamente una feminista clásica, no impulsa la agenda de las mujeres y eso marcará su gobierno; ha mostrado estar muy cerca de Trump, y más que de los chinos y más que de los rusos; de igual forma ha manifestado que Japón requiere un ejército fuerte, un mayor gasto fiscal para el crecimiento y un duro tratamiento a los temas migratorios, ese es más o menos el perfil.
Poco a poco los mexicanos iremos conociendo a esta nueva primera ministra que, sin duda, busca un mayor nacionalismo y endurecerá la política japonesa, será muy interesante ver el reacomodo en la política internacional. No olvidemos que la relación económica de México y Japón es muy intensa y lo que haga la nueva ministra incidirá sobre las inversiones niponas, sobre todo en el sector automotriz donde armadoras como Nissan, Toyota, Honda y Mazda tienen una enorme presencia en nuestro país.
